Medir el tiempo por veranos
Sólo hay tiempo para percibir por un instante la melancolía del refugio de Bobby y pensar en la extrema tristeza que impregna todos los lugares de veraneo, sean cabañas o casitas en el bosque o la costa, en Penobscot Bay o el Cabo de su niñez, en Michigan ahora, que no es únicamente la melancolía de cuando la infancia ha pasado y el lugar ya no existe, ni la tristeza genérica de colocar tablones para proteger las ventanas, sino una tristeza en plena estación, en los soleados días de las excursiones lo mismo que en los días nublados pasados en la tumbona, del silencio de agosto, la marcha de los pájaros, las varas de oro, el adiós en cada saludo. La triste vanidad de medir el tiempo por veranos, anulando el invierno y el resto de las cosas.
Austin Wright | Tres noches, 1993
Imagino ese lugar y la extrema tristeza que todo lo impregna...Un abrazo.
ResponderEliminarBuenas noches, Chimista:
ResponderEliminarNo he leído el libro. He ido a wikipedia a ver dónde estaba la
Bahía de Penobscot.
Me gustan mucho los cuadros de Hopper.
Te dejo un enlace.
Saludos
Darío, los cuadros de Hopper recogen muy bien la soledad y cierta tristeza indefinida, a medio camino entre lo lírico (elegíaco) y lo narrativo (apenas insinuado). El de arriba se llama Summer Evening y me pareció que cuadraba con las palabras de Austin Wright. La tristeza de los lugares de verano cuando están vacíos. La condenada tristeza de esperar siempre el verano. Un abrazo.
ResponderEliminarGelu, acabo de terminar hace unos días esa novela y me ha gustado mucho. El fragmento de arriba me llamó la atención, pero el tono de la novela no es ése. Gracias por los enlaces. No tenía ni idea de dónde estaba la bahía de Penobscot. A mí también me encantan los cuadros de Hopper. Cada entrada la empezaría con uno distinto. Muy interesante el artículo de El País. Saludos.
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